C.R. Tres Cantos – URO Rugby Alcorcón

Resumen

Este sábado jugamos el sexto partido de la temporada en casa contra Alcorcón. A pesar de ser en casa en esta ocasión fuimos los justos.

En muchos aspectos la sensación que dejaron nuestros aldeanos fue exactamente la misma que en el primer partido de temporada, se volvieron a dejar el alma en el campo. La diferencia con el primer partido fue el orden, la defensa atenta, las subidas intimidatorias en defensa, la agresividad en los contra rucks. En el campo se quedó parte de la voz de los jugadores, al grito de ¡¡¡FUERA!!!, que se oía al unísono, tanto nuestros delanteros, no implicados en el agrupamiento, que convenientemente se ubicaban como postes defensivos al lado de dichos agrupamientos, como los tres cuartos subían en línea y sin dar cuartel, fisuras ni huecos al contrario para empujarles fuera de nuestro campo.

Fue un partido que se ganó exclusivamente en la defensa, se estuvo todo el partido, que fue más corto de lo normal, peleando en nuestra línea de 22, con una intensidad que hasta a los del fútbol americano que utilizarían el campo después de nosotros quedaron embelesados; muestra de ello es que a pesar de cedernos su tiempo en la utilización del campo, pudimos percibir en sus caras el respeto ante el desarrollo del partido y al final nos saludamos y no tuvieron nada que reprocharnos o perdonarnos sino que intuimos, aunque no lo dijeron, agradecer el esfuerzo de trece chavales que la volvieron a liar bien gorda con unión, coordinación, comunicación, intensidad, ganas y confianza mutua.

Como detalles, os contaremos que a nuestro primer centro en los dos primeros balones que se abrieron a los tres cuartos, el primer centro de Alcorcón le cazó en dos placajes que daban miedo. ¿Que es lo que pasó cuando abrieron ellos?, que nuestro primer centro subió como una exhalación y placó con tal fuerza a su primer centro que lo paró en seco (el nuestro salió rebotado) pero allí estaban sus compañeros en el apoyo para llevarlo al suelo y montar el ruck, todo el partido fue así.

Tres intentos de ensayo tuvieron los de Alcorcón que fueron neutralizados porque los nuestros se agarraron al balón e impidieron que el atacante lo posase en marca, todo el partido fue así. En definitiva una jornada de rugby no apta para cardiacos pero memorable, los de Alcorcón con un hambre de balón desmesurada, digno de elogio, pues nos mantuvieron contra las cuerdas, jugando bien, haciendo combinaciones de tres cuartos con cambios de sentido de juego, y nuestros “irreductibles” aldeanos leyendo sus movimientos para anticiparse en la defensa.

Al final, Pablo volvió a ser decisivo al transformar nuestro único ensayo mientras que Alcorcón, estando cerca de ello, no consiguió sacar los dos puntos, resultando 7 a 5 el tanteo final.

Esto es rugby.